De no tener nada a tenerlo casi todo
Crónica de la Visita de David Bisbal a la Ciudad de México en Abril del 2016
Esta crónica es larga, si prefieres sólo escucharla puedes hacerlo en:
Cuando hace 2 meses vi que David Bisbal daría un concierto en la Ciudad de México, me llené de emoción e ilusión, misma que disminuyó conforme pasaron los días y fui comprendiendo que la dinámica para conseguir los boletos era bastante complicada. Ésta consistía en tener una tarjeta de Crédito de BBVA Bancomer Mastercard de que no se puede solicitar, si no que sólo se puede obtener al hacer el canje de otra tarjeta de una muy importante cadena de supermercados y tiendas departamentale emitida antes del 2013, y para colmo que el canje se hubiera realizado en el periodo de diciembre del año pasado al 15 de abril. Todas las condiciones volvían virtualmente imposible asistir.
Incluso hubo quien intentó venderme los boletos en una cantidad exorbitante, sobretodo sin esa persona tener aún físicamente los boletos, ni saber de qué asientos se trataban.
Muchos eran los miembros del club de fans Bisbal Street Team que queríamos asistir, y pocas las oportunidades. Gracias a Dios, y a nuestros angelitos, ocurrió el milagro, surgió la oportunidad y todos los chicos del club que lo deseábamos pudimos obtener/ganar boletos. Y gracias a que una chica del club pudo recoger con anticipación sus boletos, supimos que el concierto sería de acceso general, así que estábamos preparados, y dispuestos, a ir a hacer fila, y así poder alcanzar lugar lo más adelante posible.
El Aeropuerto.
Llegó la semana del concierto, y arrancaba con la llegada de David a la Ciudad de México, por primera vez, si bien no geográficamente, si con ese nombre pues ésta entidad de los Estados Unidos Mexicanos, como en realidad se llama México, desde el 29 de enero de este año dejó de llamarse Distrito Federal (DF).
David prácticamente avisó en que vuelo venía, al compartir una fotografía con Rosario Flores tomada ya dentro del avión que lo traería a México. A mi, y a los miembros del club nos daba algo de temor que se juntara mucha prensa y gente por ese motivo, y fuera un tumulto muy grande
Ese día por la mañana terminé mi carta, que había empezado a escribir y decorar desde la tarde anterior, y me ponía nerviosa y más nerviosa conforme pasaban las horas.
Alrededor de las 4:30 de la tarde llegó Lin , una muy linda chica del club, a mi casa, un poco antes yo terminé de arreglarme pues había estado todo el día con lo de la carta, y resolviendo algunos asuntos de casa. Pedimos el uber y nos fuimos a recibir a David
Llegamos a la sala por la que llegaría, revisamos los monitores, para saber el status de su vuelo procedente de Madrid, y nos seguimos poniendo nerviosas. Todavía nadie más del club había llegado. Poco a poco fueron llegando las otras 5 chicas del club. Logramos identificar a otros chicos que aunque son admiradores, no son parte de ningún otro club de fans.
Pasaron los minutos y seguíamos nerviosas, de prensa, sólo descubrimos 3 cámaras, que pudo investigar Lin, eran para cubrir la fuente de deportes y estaban esperando al equipo mexicano de clavados. En cuanto vimos que el status del vuelo era “Arribo”, nos acercamos hacia las puertas para ver si salía, nos dividimos para cubrir las diversas puertas. Desafortunadamente, y como efecto secundario al medicamento que tomo, cuando
me pongo nerviosa, dejo de ver con nitidez a larga distancia, así que nunca soy la primera en ver a David, generalmente confío en lo que ven las demás. Pasaban los minutos… se abrieron las puertas y vi el fondo a David con Ito… yo emocionadísima por haberlo visto, corrimos a avisar a las otras chicas que no estaban en nuestra puerta, y de los nervios en lo que buscaba la carta, sacaba la cámara y demás, ya David estaba afuera.
Nos acercamos, David saludó al equipo de Universal Music que estaba ahí y luego los 2 besos obligados… Y comenzó a caminar hacia la salida dónde los iría a buscar la camioneta. En el camino le di la carta, le pregunté por el viaje, dijo que había estado muy bien, le pregunté también por cómo va el disco y me dijo que está muy contento, y que espera que sea más moderno, cuando le dije osea más mmm electrónico, me dijo que sí.. Mucho más. Que ilusión me hace que nos cuente un poquitito más sobre ese disco, que aparentemente tiene fecha de salida en noviembre. 
Todas las presentes pudimos tomarnos al menos una foto con él, hubo quién como no le gustó la primera, se tomó una segunda, nos tomamos 2 veces la foto de grupo, porque fueron 2 celulares… jaja Hubo quién hasta de los nervios se le olvidó cómo tomarse una selfie. Jaja y nos la pasamos entre bromas, besos y abrazos. De los chicos que no conocíamos uno le dio a firmar unas cuantas revistas editadas en el 2004, y david bromeó con la antigüedad de ellas. Le dijimos mil veces que nos veríamos en el concierto jajaja 
Llegó la camioneta, y David la abordó, mientras nosotras gritábamos “Bisbal queremos a Bisbal” Nos quedamos esperando a que la camioneta arrancara y se marchara y aunque los vidrios estaban tinados, distinguíamos perfectamente su silueta, y logramos ver cómo nos mandaba besos y nos decía adiós en el momento en que se marchaba.
Estábamos muy emocionadas y felices por lo que nos esperaba el miércoles.
La fila del concierto.
Llegó el día del concierto, y mis nervios estaban a tope, a veces como coordinadora del club de fans me estreso y me preocupo por más cosas de las que debería, pero es parte de. Habíamos quedado de vernos el primer grupo para hacer fila, a la 1pm, y yo tenía perfectamente medidos mis tiempos para guardar cosas, arreglarme, y hasta contestar mensajes, pero no contaba con un pequeño detalle, que con el estrés, me dio un calambre (contractura) en el cuello. Otro de los efectos secundarios de mi medicamento son justamente los calambres, así que no es raro que me den en manos o piernas, y sé cómo manejarlo, pero cuando me dan en el cuello, son muy fuertes y dolorosos, tardan mucho en que se me quiten. Así que luego de varias cremas y masajes, estuve bien, pero había perdido tiempo… iba ya con demora.
Salí de casa a la 1pm, de camino iba platicando con el conductor de Uber, y resultó que él sí había cambiado su tarjeta en diciembre, pero que nunca se enteró del concierto. Y de paso me dijo que David era uno de los mejores cantantes y se notaba que era una persona sencilla.
Llegamos al Pepsi Center, y ya había 5 niñas del club Bisbal Street México (BST), pero no les habían dicho dónde formarse, corrí a buscar dónde era y de camino me encontré a Valeria,otra chica del club, y ya resolvimos que la fila era por otro lado, dónde había vallas metálicas, cómo las que ponen para hacer fila en un parque de atracciones, y estaba bajo un techo que nos protegería del sol, que ese día era especialmente intenso.Una vez ahí nos dispusimos a esperar…
Yo estaba muy feliz y emocionada pues como coordinadora del Bisbal Street Team, el que todos los chicos que quisieran y sobre todo pudieran asistir al concierto pudieran hacerlo, es algo que me da satisfacción, sobretodo pensando que apenas unos días antes no teníamos ninguna posibilidad de ir.
Supuestamente las puertas se abrirían a las 7 de la noche. Las horas se nos pasaron volando entre, risas, recuerdos, apuestas… jeje No cabe duda que el ambiente bisbalero es de lo mejor. Poco a poco fueron llegando los demás miembros del club hasta que fuimos 17, y algunos acompañantes. A las 7 nos empezamos a ordenar para ver cómo entraríamos y poder llegar a las primeras filas. Mientras estábamos en eso llegaron a grabarnos y nos pidieron algunas porras y que cantáramos alguna canción de David, así que decidimos cantar “Diez mil maneras”. Nos salió tan bien, que parecía que ensayamos juntos todos los fines de semana.
Fue hasta algunos minutos después de las 7:30 de la noche, que nos dieron acceso, algunos corrimos o caminamos más rápido, y conseguimos que todos los miembros del BST estuvieran en las 3 primeras filas del lado izquierdo. La verdad estábamos muy emocionados. Todavía faltaba por llegar Feri una de mis mejores amigas de tanto dentro como fuera del mundo bisbalero y quién tenía mucho tiempo sin asistir a un concierto de David. Cuando llegó, salí para darle su boleto, y en el camino vi a uno de los músicos de David a quién admiro mucho, Alfredo Chacón, el percusionista, pero por la prisa para darle el Boleto a Feri, no lo saludé.
Tomamos nuestros lugares, intenté acomodar un poco todos los aditamentos que iba a sacar en el concierto, guantes con foquitos, abanico, bandera, mascada, skyliner, ventilador… jaja (sí todo eso llevo). Programé el skyliner sólo con 2 mensajes “Besos” y “Mi ángel”, éste segundo mensaje fue prácticamente premonitorio.
Tambén aprovechamos para tomarnos algunas fotografías frente al escenario. Yo estaba de verdad feliz, sólo me hacían falta 3 personas en el concierto para ser perfecto: mi mamá, Karen, y Mily.
Nos volvieron a grabar dentro, y en eso estaban, cuando apagaron las luces, y el talentoso y bien parecido Pablo López, salió como aperitivo interpretando 3 temas. La verdad a mi me gustó mucho, y me hizo la espera bastante amena. Se fue con un buen aplauso del público, que si bien, no conoce sus canciones, para alguien “nuevo” en México, ya es ganancia que se vaya con aplausos y no con abucheos, así que tengo la impresión de que le irá muy bien en nuestro país.
El Concierto
Después de Pablo habrán pasado unos 10 ó 15 minutos, cuando se nuevamente el Pepsi Center se puso a oscuras, los músicos tomaron sus lugares y se encendieron la luces azules en el escenario, comenzando entonces a sonar las notas que para mi ya son conocidas, y que me aceleran inevitablemente el el corazón, del intro del concierto de David.
Y cuando comenzaron a sonar las primeras notas de “Ave María”, me fue inevitable comenzar a saltar y gritar, de emoción, y cuando David apareció en el escenario totalmente vestido de blanco ¡Mi emoción fue total! Un ángel había caído en la Ciudad de México, e iba a cantar para nosotros. Decir que se veía guapo, es poco se veía guapísimo… De verdad que es como los buenos vinos y con los años se va poniendo mejor.
El Rulitos estaba muy muy emocionado y feliz de estar ahí, en pocos segundos ubicó al club de fans, pues íbamos con nuestras playeras rojos, y una decena de abanicos que han sobrevivido a la intensidad de los conciertos.
Al terminar la primer canción, David dirigió unas palabras, y agradeció a BBVA Bancomer, y Mastercard, patrocinadores del concierto, la oportunidad de en medio de la preparación del disco, poder estar cerca de su banda, del público, y mientras nos señalaba, dijo también del club de fans, poniendo a todo el BST como loco y emocionado a gritar y saltar.
Esta es la lista de canciones que estaba pegada en el piso, y que gracias a Feri tengo en mi colección.
Durante todo el concierto David tuvo detalles de miradas y sonrisas con prácticamente todos los miembros del club de fans. Y es que una mirada y una sonrisa para nosotros valen oro.
Cuando saqué en algún momento el skyliner, y David lo vio, no alcanzaba bien a distinguir que decía “Besos” y hasta en el micrófono preguntó “¿Qué dicen esos foquitos rojos?” jajaj yo feliz. Y otro momento muy especial para mi, fue que cuando bia a cantar el triste, le acerqué al escenario la bandera de México que llevaba, me preguntó que si se la regalaba, y le dije que claro que sí… Que bonito, es que David diga que México es su segunda casa y que se siente mexicano cada vez que viene.
Cuando comenzó “El ruido”, no nos habíamos dado cuenta que Pablo López había regresado al escenario, y eso que lo teníamos justo enfrente, fué hasta que cantó que realmente lo percibimos. Salió una versión muy hermosa que muchos pudieron disfrutar en directo a través de Periscope.
Cuando Bisbal canta los temas mexicanos, es un momento muy mágico, la gente se le entrega al cien por ciento, y él corresponde de la misma manera. Son instantes que no vamos a olvidar.
La voz de David, maravillosa, cada nota que sale de su voz es arte. Lo que sí, se nota que está en buena forma porque aunque no está gira fue poco lo que le pesó la altura de la ciudad de México, y en el único momento en que no le alcanzó el aire fue en el rap en “Torre de Babel”, el resto fue sorprendente.
Ya en la penúltima canción, Feri se pasó hacia adelante en “Mi Princesa”, y un momento super especial y bonito, porque todas las chicas del BST que estábamos en esa primera fila nos abrazamos, y David notó el detalle y nos sonrió.
Cómo ya sabíamos que nos iba llamar, en cuanto terminó “Mi princesa” estábamos listas para correr hacia adelante, y a la primera nota de “Diez mil maneras” salimos disparadas al frente del escenario, momento en que David pidió la bandera de México que él llevaba. El momento genial, él, más cercano al público físicamente, lo dejó todo, y se fue feliz… Y nosotros también.
Fue un concierto espectacular, digno de recordarse, con un Bisbal entregadísimo, feliz, y muy muy muy emocionado. El mejor que he visto hasta el momento en ésta ciudad.
Toda la experiencia fue especial para mi, luego de ir recuperándome de una pérdida personal importante que ocurrió a finales del año pasado. Me di cuenta que aunque no pareciera posible, me sigo emocionando como si fuera la primera vez, me sigo poniendo nerviosa, roja, el saludar a David me sigue poniendo una enorme sonrisa en mi cara, que ni siquiera me cabe. Y que un concierto de él sigue siendo la mejor experiencia para revitalizar el cuerpo, y el alma, sin importar que ya hayan pasado 13 años desde la primera vez que lo vi en vivo en un escenario.
David dijo que se llevaba la energía del público, y como yo publiqué en Instagram Gracias David Bisbal por una noche tan especial, por cada canción, por cada nota que nos hace vibrar. Por darnos la oportunidad de compartir con los amigos. La comunión que hay en un concierto es increíble pues todos nos llevamos algo, tú nuestra energía y cariño, nosotros experiencias increíbles, recuerdos imborrables, sonrisas en el rostro y a ti por siempre en nuestros corazones.
Gracias por ser luz en la oscuridad, y una explosión en la alegría.
Te esperamos pronto de regreso, para seguir amándonos a través de la música. Porque amar es compartir
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